Aspectos clave a la hora de contratar un seguro de comunidad

Compañías para contratar un seguro de comunidad hay muchísimas. Y si añadimos que cada compañía tiene un promedio de 2 a 5 tipos de pólizas distintas, la decisión de contratar un seguro para nuestra comunidad de vecinos puede llegar a complicarse.

Una comunidad de vecinos en muchas ocasiones funciona como una microempresa, pero hay que recordar que vivimos en ella, y por ello tomar una mala elección puede acarrear una serie de incidencias y problemas con el resto de nuestros vecinos.

Por todo esto, hoy en iFinca queremos tratar este tema y orientaros para que ya sea a través de vuestro administrador, correduría de seguros, agencia o vosotros mismos de forma independiente, podáis tomar la decisión adecuada con respecto a la contratación o renovación de vuestro seguro de la comunidad.

¿Qué es un seguro de comunidad?

Lo primero que debemos saber es que un seguro de comunidades es una póliza que entra dentro de los “Multi riesgo”, es decir, se podría definir como la integración bajo el mismo contrato de un conjunto de coberturas típicas de muchos seguros.

Una vez aclarado esto, es fácil pensar por qué existe tanta diversidad en el mercado actual y en este sentido es importante resaltar, que la misma cobertura puede llegar a diferir incluso de una compañía a otra. Es por esto mismo que hay que prestar especial atención a las famosas “cláusulas limitativas”.

¿Qué tipos existen?

A modo de resumen, podríamos hacer una primera clasificación entre básicos, medios o de alta cobertura.

Un seguro básico podría ser aquel que cubre una responsabilidad civil, incendio del inmueble, cobertura de lunas, etc. (éstas tres intentan salvaguardar el coste por daños a un tercero).

Un seguro de comunidad medio incluiría todas estas coberturas, y además tendría añadidas coberturas como daños propios por agua, desatascos, etc. Normalmente con una franquicia se evita que la prima se dispare al compartir el riesgo mediante un copago en caso de siniestro.

Por último, un seguro de alta cobertura engloba todo lo anterior, además de incluir coberturas extras como gestiones de plagas, coberturas de manitas para pequeños servicios de mantenimiento etc. Y normalmente esta clase de seguros suelen ir sin franquicia, asumiendo la aseguradora todo el coste de los siniestros de forma íntegra.

¿Cómo saber cuál es el mejor seguro de comunidad en nuestro caso?

Sí conocemos el riesgo (las características de nuestra comunidad), y conocemos las necesidades del mismo, tenemos dos tercios del trabajo realizado. Ahora debemos elegir qué póliza en relación calidad / precio se adapta mejor a todo lo anterior.

En este punto vamos a reflexionar sobre cada una de las coberturas más genéricas para que vosotros podáis decidir qué póliza necesitáis:

  • Responsabilidad Civil: Cuanto mayor sea este importe, mayores serán los costes que la aseguradora podrá asumir frente un daño a terceros. Os aconsejamos que aquí se use el sentido común y se valore el daño que vuestra comunidad puede causar.
  • Incendio: Esto es el daño de siniestro total. En este sentido es importante resaltar que este valor debe ser el coste de reconstrucción total del inmueble, no la suma de los valores de venta de todos los pisos. Como aclaración en este punto se debe tener clara la figura del infraseguro, es decir, si se asegura algo por debajo de su valor real, la consecuencia de ello es que la comunidad deberá hacer frente a un porcentaje del coste del siniestro, porcentaje restante del valor real.
  • Lunas: Normalmente es un seguro sobre lunas y espejos, no obstante, algunas pólizas incluyen una franquicia y es importante tenerlo en cuenta. Más delante se hablará de las franquicias.
  • Enseres: Los enseres son el contenido que pueda tener la comunidad. Esto puede ser, desde sofás y mobiliario, hasta extintores, macetas y todo el contenido que pudiera haber en las zonas comunes propiedad de la comunidad.
  • Daños propios: Es una especie de cobertura “a todo riesgo”, que cubre cuando la comunidad se daña a sí misma, y en este apartado vamos a explicar el término de “franquicia”. Una franquicia es un copago que asume la parte asegurada para participar en los costes de siniestralidad con la compañía aseguradora. La principal ventaja es que encontraremos primas más asequibles con un espectro de cobertura más amplio. El problema viene si tenemos una comunidad con una frecuencia de siniestros elevada ya que los asegurados pagarán una suma importante además de la prima anual de la póliza, por lo que habrá que reflexionar sobre qué tipo de comunidad somos ya que a veces pagar más es un ahorro a largo plazo.
  • Más coberturas: Cualquier otra cobertura adicional debe ser valorada de igual forma que las anteriores, y siempre analizando las necesidades de la comunidad, como por ejemplo: coberturas frente a plagas (éstas serán muy interesantes en zonas marítimas), y una buena cobertura de asistencia y mantenimiento en una gran comunidad puede ahorrar mucho dinero si no disponemos del servicio concertado.

La clave es saber que el seguro es un complemento que nos hará ahorrar dinero a largo plazo, y un elemento complementario en nuestra administración de comunidades. Por lo que no debe ser elegido de forma arbitraria o atendiendo sólo a razones de precio.